Sin embargo hay quienes utilizan el Viaducto Bicentenario sólo cuando hay mucho tráfico; la idea de éstos es la de que, cuando no es hora “pico” y el tráfico está más tranquilo, se hace el mismo tiempo por el Periférico.
Para ver si esta aseveración era cierta, de que ambas vías se desplazan a la misma velocidad y no hay un verdadero ahorro de tiempo al utilizar el Viaducto Bicentenario, hicimos una prueba para ver como nos iba y quien llegaba más rápido:
Otra vez utilizamos dos automóviles, uno se fue por el Viaducto Bicentenario (desde Lomas Verdes con dirección a Río San Joaquín) mientras que el otro utilizó la ruta normal del Periférico. La hora fue una más “tranquila”, las nueve y media de la mañana. De nuevo hicimos un monitoreo del avance utilizando nuestros teléfonos celulares.
Los resultados fueron muy claros:
A pesar de que parece que es igual utilizar el Viaducto Bicentenario que el Periférico, esta prueba demostró que al utilizar la vía logramos una mayor velocidad para llegar más rápido a nuestro destino y esto se manifiesta en un ahorro de tiempo y dinero.